¿Buscas rejuvenecer tu apariencia de manera segura y efectiva? En el mundo de la medicina estética, los hilos tensores se han convertido en una de las alternativas más populares en rejuvenecimiento facial. Esta innovadora solución no quirúrgica permite combatir los signos de la edad y restaurar la firmeza de la piel.
Los llamados hilos tensores son elaborados a partir de materiales biocompatibles, y ofrecen la promesa de un lifting facial sin la necesidad de cirugía. En este post, desde Clínica Novoa te contaremos en detalle cómo es el proceso de colocación de hilos tensores, desde la consulta inicial hasta los pasos involucrados en el procedimiento mismo, así como sus principales beneficios.
¿Cómo colocamos los hilos tensores en Vigo, Santiago y A Coruña?
Los hilos tensores son un tratamiento estético similar a un lifting pero sin requerir cirugía. Se trata de una técnica ambulatoria que precisa anestesia local y consiste en la colocación de tensores dérmicos insertados bajo la piel de ciertas partes del cuerpo (cuello, rostro, escote…) mediante pequeñas incisiones que permiten un tensado cutáneo que corrige la flacidez, reduce las arrugas, etcétera.
La cantidad de hilos tensores que se vayan a insertar dependerá de los requisitos individuales de cada persona, junto con las sugerencias proporcionadas por nuestros expertos en rejuvenecimiento facial en las ciudades de Vigo, Santiago y A Coruña.
Dentro de sus principales ventajas destacamos:
- Rejuvenecimiento facial sin cirugía.
- Estimulación del colágeno.
- Resultados naturales y sutiles.
- Procedimiento no invasivo.
- Tiempo de recuperación rápido.
- Menos riesgos y complicaciones en comparación con la cirugía.
- Efecto lifting inmediato.
- Mejora de la textura de la piel.
- Resultados duraderos (24-36 meses).
¿Cómo se colocan?
A continuación te explicamos de manera sencilla y resumida cómo colocamos los hilos tensores en Clínica Novoa:
Anestesia local. Antes de comenzar aplicamos un poco de anestesia local en la zona donde se insertarán los hilos.
Marcado y planificación. Señalamos en el rostro las partes en las que los colocaremos para asegurarnos de lograr el efecto deseado.
Inserción de los hilos. Empleamos pequeñas agujas con los hilos tensores enhebrados a través de ellas. Las insertamos debajo de la piel siguiendo las marcas previamente realizadas. Una vez que la aguja está en su lugar, la retiramos y los hilos quedan dentro de la piel.
Ajuste y tensado. Posteriormente llevamos a cabo un suave ajuste para tensar la piel, ayudando a levantar y dar firmeza a la zona tratada.
Cierre y cuidados. Para finalizar cortamos los extremos de los hilos y será tu turno de cuidar la zona tratada siguiendo nuestras recomendaciones.
Pídenos presupuesto
Si quieres saber cuánto cuesta el tratamiento con hilos tensores, no dudes en ponerte en contacto con el equipo de Clínica Novoa de cualquiera de nuestras clínicas en Santiago, Vigo o A Coruña. Te proporcionaremos asesoramiento y presupuesto personalizados sin compromiso.